Me siento rara teniendo un día así.
Pero yo vi sonreír a mi viejo.
Y me tomé un vino mientras escuchaba
que hay cosas
que
no puedo controlar.
Mi amiga me escribió y me dijo que soñó con su amigo.
Él está en ese otro plano que tanto tememos.
Ella lo soñó. Él estaba bien. Lo dejó ir.
Y ella volvió un poquito.
Mi hermana tiró tres carcajadas que creo bajaron la tensión eléctrica
y mi mamá me sonrió agradecida porque le lleve una galletita.
A veces
los días
sí que
son buenos.
Lara Miller tu texto emociona , llega a lo mas profundo de mi ser, porque cuando te leo es como si me dejaras entrar a lo profundo de tu ser
ResponderEliminarte admiro mucho